Cuidar a quienes tienen enfermedades neurodegenerativas como el Parkinson representa una oportunidad crucial para implementar estrategias integrales de cuidado y apoyo. Estas estrategias no solo deben centrarse en atender los síntomas físicos, sino también en abordar las necesidades emocionales, psicológicas y sociales de los pacientes, mejorando así su bienestar y calidad de vida.
El Parkinson es actualmente el trastorno neurodegenerativo de mayor crecimiento a nivel mundial, con un alarmante incremento de casos de 2,5 a 6,1 millones entre 1990 y 2016. En Latinoamérica, Chile destaca por su notable aumento en la incidencia de esta enfermedad, atribuible en parte al incremento de la esperanza de vida. Chile se posiciona como uno de los países con mayor longevidad en la región, y el envejecimiento de su población ha sido identificado como un factor de riesgo significativo para el desarrollo del Parkinson. Según estudios de la Universidad de Chile, se estima que alrededor de 30.000 personas viven con esta enfermedad en el país.
En este contexto, la detección temprana y el manejo adecuado de los síntomas son fundamentales. No obstante, para realmente mejorar la calidad de vida de los pacientes, es esencial adoptar un enfoque holístico que incluya el apoyo emocional y psicológico, la rehabilitación física, y la integración de redes de apoyo comunitarias y familiares. Al hacerlo, se puede ofrecer un cuidado integral que aborde todas las dimensiones del bienestar del paciente, reconociendo la complejidad y las múltiples facetas de vivir con Parkinson.
Factores de riesgo y detección temprana
El Parkinson es una enfermedad neurodegenerativa compleja que afecta principalmente a personas mayores de 60 años, aunque también puede manifestarse en edades más tempranas. Factores como predisposición genética, exposición a toxinas ambientales y diferencias de género influyen en el desarrollo de la enfermedad.
Factores de Riesgo:
* Edad: La edad avanzada es uno de los principales factores de riesgo.
* Genética: Algunos casos están asociados con mutaciones genéticas específicas.
* Exposición a toxinas: La exposición prolongada a herbicidas y pesticidas puede aumentar el riesgo.
* Género: Los hombres tienen una mayor probabilidad de desarrollar Parkinson que las mujeres.
Para reconocer y abordar eficazmente el Parkinson, es fundamental estar atentos a las señales de advertencia tempranas que pueden indicar la presencia de la enfermedad. Estos signos iniciales pueden variar en su presentación y gravedad, pero su detección puede facilitar un diagnóstico temprano y un manejo adecuado. Algunas señales de advertencia pueden ser:
* Temblores: Movimientos involuntarios y rítmicos, especialmente en las manos o los dedos en reposo.
* Rigidez muscular: Sensación de tensión y dificultad para realizar movimientos.
* Bradicinesia: Lentitud en los movimientos que afecta las actividades diarias.
* Cambios en la postura y el equilibrio: Problemas para mantener una postura erguida y un equilibrio estable al caminar.
Prevención y apoyo psicológico para una mejor calidad de vida
Es fundamental promover hábitos de vida saludables que puedan reducir el riesgo de desarrollar Parkinson. Esto incluye mantener una dieta equilibrada, realizar ejercicio regularmente y evitar la exposición a sustancias tóxicas siempre que sea posible. Especialistas recomiendan estrategias como las siguientes:
* Ejercicio regular: Actividades físicas como caminar, nadar o practicar yoga no solo mantienen la movilidad, sino que también mejoran el bienestar general y pueden ralentizar la progresión de los síntomas.
* Dieta saludable: Consumir una dieta equilibrada, rica en frutas, verduras y proteínas magras, proporciona los nutrientes necesarios para apoyar la salud cerebral y general.
* Estimulación mental: Mantener la mente activa a través de la lectura, juegos de lógica o aprender nuevas habilidades puede tener efectos positivos en la salud cognitiva y emocional.
* Terapias complementarias: Fisioterapia, terapia ocupacional y logopedia pueden ayudar a manejar los síntomas y mejorar la funcionalidad diaria.
Asimismo, el apoyo psicológico es primordial, ya que al contar con un sistema de apoyo que incluya familiares, amigos y grupos de apoyo puede ayudar a manejar los desafíos emocionales y psicológicos de la enfermedad. En Chile, existen diversas organizaciones y grupos de apoyo que ofrecen recursos y acompañamiento a las personas afectadas por el Parkinson y sus familias.
Actividades físicas y cognitivas
En LivUP, entendemos la importancia de ofrecer cuidados personalizados para personas mayores que enfrentan desafíos de salud como el Parkinson. Una de las claves para mejorar la calidad de vida de estos pacientes es la inclusión de actividades de estimulación física y cognitiva diseñadas a medida. Estas actividades son esenciales para mantener la autonomía y promover el bienestar diario de los pacientes. Para las personas con Parkinson, ofrecemos un conjunto de actividades específicas que incluyen ejercicios físicos adaptados, como ejercicios de movilidad y equilibrio, para mejorar la coordinación y reducir la rigidez muscular.
También incorporamos actividades cognitivas como juegos de memoria, rompecabezas y tareas de resolución de problemas que ayudan a mantener la mente activa y a retrasar el deterioro cognitivo. El enfoque de LivUP se basa en estrategias de cuidado bien planificadas, prevención activa y detección temprana.
Cuidado Especializado
A través de nuestros Servicios de Apoyo y Cuidado Humano, ofrecemos turnos de 8 a 24 horas realizados por cuidadoras especializadas en Parkinson, Alzheimer y otras demencias. Estas cuidadoras brindan apoyo en la realización de actividades de la vida diaria, tales como higiene personal, toma de medicamentos, alimentación y desplazamiento. Estos servicios pueden llevarse a cabo en el hogar de la persona mayor, en residencias de personas mayores o durante una hospitalización, garantizando así una atención continua y adaptada a las necesidades individuales de cada paciente.
Con este enfoque integral y personalizado, buscamos no solo gestionar los síntomas del Parkinson, sino también promover la autonomía y el bienestar diario de los pacientes. Nuestro compromiso es proporcionar un apoyo integral para una vida más plena, autónoma y saludable.
